Control de Roedores

Entender al roedor para eliminarlo bien

El control efectivo no empieza con veneno: empieza con conocer el comportamiento. Ratas y ratones buscan tres cosas: alimento, agua y refugio. Se mueven pegados a paredes (evitan espacios abiertos), marcan rutas con grasa del pelaje y dejan señales claras: excretas, roeduras y ruidos nocturnos.

Especies y comportamiento (por qué importa)

• Rata de alcantarilla (Rattus norvegicus): cuerpo robusto, suelo y sótanos. Hace madrigueras, sigue tuberías y desagües. Prefiere proteína y granos húmedos.

• Rata de techo (Rattus rattus): ágil y trepadora. Tejas, falsos techos, árboles que tocan la casa. Le atraen frutas y semillas; suele entrar por cables y aleros.

• Ratón doméstico (Mus musculus): pequeño, curioso. Nidos en electrodomésticos, muebles y bodegas. Come poco pero muchas veces; deja migas y orificios pequeños.

Saber quién es determina cómo se controla: altura o suelo, tipo de cebo, ubicación de estaciones, tipo de trampa y, sobre todo, puntos de exclusión.

Riesgos reales (sin alarmismo, pero claros)

• Salud: contaminación de alimentos, orina y heces; riesgo de enfermedades.

• Daños: roen cables (cortes, cortos), empaques y madera.

• Escalada: una hembra puede tener varias camadas al año; si no se corta refugio y comida, la población rebota.

Señales que confirmamos en la inspección

• Excretas (forma/tamaño cambian por especie).

• “Manchas de grasa” en zócalos y esquinas por el pelaje.

• Ruidos en techo/pared por la noche.

• Cables, empaques y madera con roeduras.

• Agujeros de ingreso: entre techo y pared, pases de tubería, rejillas sin malla, juntas de puerta.

Qué hacemos (paso a paso)

1. Diagnóstico y mapeo de rutas: identificamos especie, nidos, puntos de agua y comida.

2. Exclusión: sellamos accesos con malla metálica, espuma de alta densidad, masillas minerales y rejillas. Sin cerrar entradas, cualquier cebo es un parche.

3. Control poblacional dirigido

   • Estaciones cebaderas con llave y cebos adecuados por especie/hábitos.

   • Trampas mecánicas de golpe o captura en rutas específicas para acelerar la reducción y evitar riesgos.

   • Monitoreo con placas y puntos testigo (sabemos si la actividad baja o se movió).

4. Saneamiento: orden, contenedores herméticos, manejo de residuos, poda de ramas que tocan techos.

5. Seguimiento: retiramos actividad, reajustamos estaciones y verificamos que el sellado aguante.

Materiales y criterios (lo que usamos y por qué)

• Estaciones cebaderas ancladas, rotuladas y ubicadas fuera de alcance de niños/mascotas.

• Cebos profesionales seleccionados según apetencia (grasa/granos/frutas) y resistencia a humedad.

• Trampas de calidad para cortes rápidos y humanitarios; cero improvisaciones.

• Barrer as físicas: mallas galvanizadas, rejillas para desagües, burletes en puerta y sellos minerales que no se roen fácil.

Lo que no hacemos

• No dejamos cebo suelto sin control.

• No saturamos de químico “por si acaso”. Primero exclusión y orden; luego cebo/trampa donde toca.

Qué puedes esperar (cronología típica)

• Día 0: inspección, sellado principal y colocación de estaciones/trampas.

• 48–72 horas: caída visible de actividad.

• Semana 2–3: retiro de focos, ajuste fino y refuerzo de barreras.

• Ciclo de garantía: monitoreo según tu tipo de espacio (hogar/negocio/bodega).

¿Por qué elegirnos?

• Atención el mismo día en la mayoría de zonas de Medellín y Valle de Aburrá.

• Métodos responsables y seguros: priorizamos la exclusión y el manejo integrado.

• Informe técnico con hallazgos, fotos y plan de mejora.

• Garantía: si reaparece la actividad dentro del periodo cubierto, regresamos sin costo adicional.

Zonas de servicio

Atendemos todo Medellín y el Valle de Aburrá (Bello, Itagüí, Envigado, Sabaneta, La Estrella, Copacabana). Consulta disponibilidad para tu barrio.

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